El Madrid escrito: La Calle del Viejo Idiota y el milagro de Nuestra Señora de las Maravillas (Calle Echegaray)

La Calle Echegaray / Foto extraída de minube.es

La Calle de Echegaray es una estrecha callejuela que comunica dos importantes vías, la muy política, Carrera de San Jerónimo y la marchosa Calle de Huertas.

Antiguamente fue conocida como la Calle del Lobo por un fatal crimen que aquí ocurrió, y que devino en una bonita tradición castiza, como nos cuenta MªIsabel Gea Ortigas.

"(...) en una de las pocas casas que había por esta zona, vivía un cazador el cual tenia en la puerta una piel de lobo rellenada de paja. Un día un niño vació la piel y enfurecido su dueño le dio al crió tal cuchillada que le dejo por muerto. La madre le recogió y le llevo ante una imagen de una virgen que un escultor tenia en deposito en su estudio y milagrosamente el chiquillo se salvo. (...) Tras el milagro a ser conocida a partir de entonces como Nuestra Señora de las Maravillas y fue trasladada hasta el convento de las Maravillas que estuvo situado en la Calle de la Palma (Hoy Iglesia de San Justo y San Pastor en la Plaza del Dos de Mayo) a la que acompaño volando sobre la misma una paloma"

Extraído de "Los nombres de las Calles de Madrid" de Mª Isabel Gea Ortigas

Fue a partir de 1888 cuando el Ayuntamiento de Madrid, cambio el nombre de la Calle para dedicárselo al prolífico José de Echegaray, ingeniero, matemático, político y dramaturgo que obtuvo en 1904 un muy discutido premio Nobel de literatura.

En el Madrid de entonces, el Echegaray literato no era bien visto por muchos de los escritores de la Generación del 98 que consideraban mediocre su trabajo, el rechazo fue tal que llegaron a firmar un manifiesto en su contra con motivo de la entrega del Nobel. De entre todos ellos, destacaba especialmente la inquina que mostraba Ramón del Valle-Inclán.

Estatua de Valle-Inclán en el Paseo de Recoletos, foto del autor.

En un muy interesante articulo, aparecido en El Mundo del 17-8-2011, Fernando Sánchez Dragó explica la rivalidad que existió entre ambos en aquel Madrid de entonces. Y cuenta la siguiente anécdota:

"El Ayuntamiento de Madrid puso su nombre [el de Echegaray] a una calle en la que vivía el poeta Nilo Fabra, que era amigo de Don Ramón. Este, fiel a su estilo, le escribió una carta y puso en el sobre: Calle del Viejo Idiota nº16. Y llegó.

- Que inteligentes son los carteros! - dijo Valle, negandose a si mismo al recurrir a un elogio."

Para visitar el lugar:

El Milagro y la Calle del Viejo Idiota en:

C/Echegaray nº16

Metro: Estaciones de Sevilla o Anton Martin.

La estatua de Valle-Inclán en:

Paseo de Recoletos

Metro: Banco de España